Skip to main content

Actualidad

06 Julio 2020

Los pagos en la crisis

Antonio Cañete, presidente de la PMcM Encuesta sobre el alcance del Covid-19 en materia de pagos a proveedores.

La Plataforma Multisectorial contra la Morosidad (PMcM), tras realizar una encuesta sobre el alcance del Covid-19 en materia de pagos a proveedores, ha alertado de la “dramática y preocupante situación que viven los autónomos, micropymes y pymes. Por su clara falta de liquidez, ahora por primera vez desde que se tienen datos son ellos los que más tardan en pagar a sus proveedores”, denuncia el presidente de la PMcM, Antoni Cañete. Históricamente y hasta el inicio de la pandemia, los autónomos, micropymes y pymes han sido los que siempre han sufrido más los impagos por parte de sus proveedores, sobre todo de grandes compañías y de las Administraciones Públicas. La crisis del coronavirus “está mermando su liquidez –que ya antes estaba afectada precisamente por la morosidad de sus clientes– hasta tal punto que empiezan a no poder pagar en plazo a sus clientes; la cadena de pagos está más fracturada que nunca”, denuncia Cañete.

Así lo ha constatado el 74% de los más de 700 participantes entrevistados. Para el 39% los que más están tardando en pagarles son los autónomos y las micropymes, y para el 35%, las pymes. A tenor de la PMcM, dicho cambio evidencia que estos nuevamente están siendo los menos protegidos por las ayudas del Estado y, por tanto, los que más graves consecuencias sufrirán.

HISTÓRICAMENTE LOS AUTÓNOMOS, MICROPYMES Y PYMES ERAN LOS QUE MÁS SUFRÍAN LOS IMPAGOS DE SUS PROVEEDORES, PERO AHORA SON LOS QUE PEOR PAGAN DEBIDO A SU FALTA DE LIQUIDEZ POR LA CRISIS SANITARIA.

La PMcM exige al Gobierno que reaccione de manera inmediata ante esta nueva realidad, que derivará dentro de unos meses en “una situación de impagos sin precedentes en España, y eso que ya desde hace años veníamos siendo el país europeo con los plazos de pago más largos”, apunta el presidente.

En este sentido, recuerda que en las últimas semanas la PMcM ha presentado multitud de propuestas para inyectar liquidez, todas ellas sin riesgo ni coste ni garantías colaterales para las arcas públicas y las empresas. Entre otras, que el Gobierno devuelva los IVAs pendientes de compensar; que se cree una línea ICO para pagar facturas pendientes a interés cero; que se liberen parte de los 12000 millones de euros de remanente que tienen los Ayuntamientos retenidos en las cuentas para que paguen a sus proveedores; que mediante un Real Decreto Ley se obligue a las Administraciones Públicas y a las grandes compañías con balances saneados y capacidad de financiación a liquidar urgentemente los pagos pendientes a proveedores (15000 millones de euros en el caso de las AAPP y 122000 millones en el de las compañías del Mercado Continuo); que se agilicen los trámites burocráticos y haya un criterio consensuado único que permita a pymes y autónomos facturar los contratos públicos paralizados por la crisis sanitaria del coronavirus; y que la AAPP asegure el eficiente reparto de los lotes en las licitaciones de manera que las pymes mejoren su acceso a la contratación pública y puedan beneficiarse del previsible aumento de gasto en inversión pública que el Gobierno hará para afrontar la crisis del coronavirus.

Si el Gobierno pusiera en marcha estas medidas para agilizar y asegurar los cobros y los pagos, “estaríamos inyectando savia desde la raíz a todo nuestro entramado empresarial, se crearía una auténtica cadena de pagos. En realidad, no estamos pidiendo nada excepcional, sencillamente, que se cumpla la ley”, aclara Cañete. Además, la PMcM considera que no debería permitirse que grandes compañías con balances saneados y capacidad de financiación no estén cumpliendo la Ley de Lucha contra la Morosidad. Al igual que se ha pedido que las empresas con filiales en paraísos fiscales no puedan acceder a ayudas y avales, “debería exigirse que las grandes empresas que deban facturas a pymes y autónomos no puedan recibir ayudas del ICO, Banco Central Europeo, etc.; las ayudas a grandes compañías, como por ejemplo que se acojan a Ertes, deberían condicionarse a que hayan liquidado sus cuentas con proveedores”, sentencia. En esta línea, el 72% de las empresas considera que ante la crisis del Covid-19, hubiera sido útil el funcionamiento de un Régimen Sancionador que multara a las empresas morosas.

Subcontratistas, el último eslabón

Los impagos de las grandes compañías afectan especialmente al último eslabón de la cadena de pagos, los subcontratistas en adjudicaciones públicas. El 49% de las empresas encuestadas que son subcontratistas en adjudicaciones públicas ha notado que desde el comienzo de la crisis se han alargado los plazos en los que cobra por parte de sus clientes, los contratistas principales. Ante esta situación, Cañete recuerda que “debe poder ejercerse la acción directa de los subcontratistas frente a las AAPP, en el caso de que los contratistas estén retrasando sus pagos”. La realidad es que, según el sondeo, solo al 0,4% de los subcontratistas le han ofrecido poder cobrar directamente de la Administración en vez del contratista principal.

La falta de actividad y liquidez son las mayores preocupaciones a corto plazo. En el momento de realización de la encuesta, el 53% de las empresas se encontraban abiertas con restricciones, el 38% abiertas sin ningún tipo de restricción y el 9% cerradas. Para el 78%, la crisis del coronavirus está afectando mucho a su negocio. Tal es así, que el 94% de las empresas ha visto que sus ventas han disminuido desde que comenzó la pandemia, con un porcentaje de reducción del 58%.

El análisis de la PMcM también refleja la realidad conjunta del sector privado y del público. Desde que ha comenzado la crisis del coronavirus, el alargamiento de los plazos de pago por parte de las Administraciones Públicas ha sido percibido por el 28% de los participantes, y el proveniente por parte del sector privado, por el 70% de los entrevistados.

De acuerdo con los resultados obtenidos en la investigación de la PMcM, lo que más preocupa a corto plazo es la falta de actividad (82%), falta de liquidez (61%), mantenimiento de la plantilla (42%), complicaciones burocráticas (15%) y falta de suministros (9%), entre otras (11%).

LA FALTA DE ACTIVIDAD (82%), DE LIQUIDEZ (61%) Y EL MANTENIMIENTO DE LA PLANTILLA (42%), SON LAS PRINCIPALES PREOCUPACIONES DE LAS EMPRESAS, SEGÚN LA ENCUESTA DE LA PMCM.

Además, el sondeo aborda otros aspectos relativos a los pagos a proveedores. Por ejemplo, se desvela que en líneas generales el confirming sigue siendo igual de habitual como medio de pago para el 83% de los participantes; que el 41% ha tenido problemas para realizar la facturación a sus clientes debido a la crisis del coronavirus; que desde el comienzo de la pandemia el 37% tiene problemas con la recepción de los contratos firmados por sus clientes; y que el 9% ha firmado nuevos contratos con cláusulas más abusivas que antes relacionadas con el pago.

Apoyo de las empresas a la PMcM

Las empresas apoyan todas las propuestas de la PMcM, especialmente algunas demandas históricas, como que el Gobierno no obligue a liquidar el IVA facturado y no cobrado (apoyo del 72%) o que el Gobierno devuelva los IVAs pendientes de compensar (54%).

También piden que se agilicen los trámites burocráticos (60%) y que mediante un Real Decreto Ley se obligue a las AAPP y a las grandes compañías con balances saneados y capacidad de financiación a liquidar urgentemente los pagos pendientes a proveedores (57%). Otras soluciones planteadas son que se implante un sistema que permita la compensación de créditos fiscales, como hacen otros países de nuestro entorno (53%); que las AAPP se aseguren que los contratistas pagan a su vez a los subcontratistas manteniendo la liquidez a lo largo de todo el ciclo de compras públicas (50%); que se modifique la Ley de Estabilidad Presupuestaria para liberar parte de los 12000 millones de euros de remanente que tienen los Ayuntamientos retenidos en las cuentas por temas de estabilidad presupuestaria (37%); y que haya un criterio consensuado único que permita a pymes y autónomos facturar los contratos públicos paralizados por la crisis sanitaria del coronavirus (28%).