El distribuidor extremeño estrena instalaciones logísticas en la Comunidad de Madrid

El pasado 8 de febrero, la empresa Cohidrex, fabricante y distribuidor de repuestos para maquinaria de obras públicas, construcción y minería, presentó a los medios de comunicación y a la asociación de excavadores de Madrid, a la de empresarios de Cáceres y a la del Corredor del Henares sus nuevas instalaciones en la Comunidad de Madrid, en la localidad de Camarma de Esteruelas, una sede modélica de 2500 m2 que forma parte de su proyecto empresarial de futuro y de la filosofía de expansión de la firma cacereña, que ha previsto la inauguración oficial multitudinaria para los próximos meses. Con la apertura al público unos días después de esta presentación, la compañía busca ser más competitiva y estar más cerca de sus clientes, iniciando al tiempo una nueva andadura que, partiendo de la experiencia de los 34 años que lleva la firma en el mercado, persigue el objetivo de mantener el crecimiento exponencial experimentado en los últimos tiempos, tanto en territorio nacional como en el resto del mundo, y continuar con su desarrollo de negocio ampliando su red logística y comercial para ser más competitiva y forjarse como referencia fundamental en el sector de los repuestos de maquinaria. Cohidrex está preparada para comerse el mundo.

Comienza una nueva andadura para Cohidrex con la apertura de sus nuevas instalaciones en la Comunidad de Madrid, con las que aspira a ser más competitiva, mejorar su infraestructura logística y fomentar el desarrollo de negocio en los próximos años. Esta nueva sede forma parte del proyecto de expansión de la casa y potenciar esta delegación persigue optimizar la logística con importantes ahorros en costes y plazos de entrega en el ámbito nacional e internacional, gracias a su proximidad al aeropuerto de Barajas y a los puertos secos de Coslada, en Madrid, y de Azuqueca de Henares, en Guadalajara, con lo que se va a favorecer el desarrollo y expansión de su gama de equipos, que cuenta actualmente con tres líneas principales de producto: material de desgaste, trenes de rodaje e implementos.

Esto lo dijo el máximo responsable de la compañía Alfonso Domínguez Fernández, presidente y CEO, que estuvo acompañado en la presentación de la nueva sede, previa a la apertura al público y a sus clientes el día 12 de febrero, por su mujer Piedad Pérez Gómez de Agüero, responsable de Administración; Raquel Ortiz Guerra, directora de márketing y comunicación; y los técnicos comerciales Juan Francisco Urosa Alonso y Fernando Lillo Villafaina y el responsable de logística Miguel A. García Santos.

LAS NUEVAS INSTALACIONES DE COHIDREX EN CAMARMA DE ESTERUELAS (MADRID) CUENTAN CON 2500 M2: UNA NAVE DE 2000 M2 DE ALMACENES Y OTROS 500 M2 DE OFICINAS.

Junto a ellos, estuvieron presentes Javier Solís Álvarez, secretario técnico de la Unión de Excavadores de Madrid (Unexma); Diego A. Hernández Pavón, presidente del Círculo Empresarial Cacereño y de la Confederación empresarial de la provincia de Cáceres (Coepca); Laly Escudero Ossorio, presidenta de la Asociación de Empresarios del Henares (Aedhe); y Roberto Aldea Carpeño, vicepresidente de Aedhe y presidente del grupo Cartés.

La excelencia en el servicio
Tras recorrer la nave con 2000 m² de almacenes y otros 500 m² de oficinas, Alfonso Domínguez confesó, ante un mural de la plaza mayor de Cáceres, que “tener estas instalaciones era un sueño” y que “hay que tener cuidado porque a veces los sueños se cumplen”. A Domínguez no le debería asustar su propia tesis porque sus sueños se vienen cumpliendo desde que en 1990 puso en marcha Cohidrex en la capital cacereña con tres objetivos legítimos y cargados de razón: cambiar el mundo, que es lo que busca todo emprendedor; labrarse un futuro prometedor para él, su familia y sus empleados, que es la legítima defensa del buen empresario; y responder ante el sector de los repuestos de maquinaria, que era el sector que conocía y le inspiraba.

Desde entonces, tres largas décadas después, su entusiasmo emprendedor y su impulso creador no han decaído ni un gramo y su actividad se ha disparado a las nubes, registrando un notable crecimiento que ni las crisis ni las dificultades del momento han podido frenar. Ha pasado de una modesta tienda familiar de repuestos para maquinaria a un tinglado empresarial de notable consistencia en el ámbito nacional y una compañía con gran proyección internacional y presencia en los cinco continentes.

Y lo ha conseguido a base de esfuerzo, ideas e innovación, con talento y tesón, sabiendo adaptarse a las circunstancias de cada momento y amparado en una ley no escrita pero que todo impulsor del mundo empresarial que se precie de serlo lleva inserta en su genética: puedes tener un buen producto, incluso un precio inmejorable, pero si el servicio no chuta bien, el resto no vale un pimiento.

En eso se ha empeñado y esa es la razón –la excelencia en el servicio al cliente– para que Alfonso Domínguez haya hecho las maletas y se haya ido a Madrid para potenciar este servicio –sin abandonar Extremadura, ojo, que sigue siendo origen y destino de la empresa tantos años después– de cara a los clientes del centro peninsular y a la exportación a Europa, quedando Cáceres para el resto del mercado nacional. Es un claro y edificante ejemplo de que el ecosistema emprendedor en España está más sano que nunca a pesar de las dificultades y los altibajos intrínsecos a la actividad económica y al maremágnum político.

ALFONSO DOMÍNGUEZ: «YO TENÍA MUY CLARO QUE ES PREFERIBLE DEJAR DE VENDER PORQUE ERES CARO, A NO PODER VENDER PORQUE NO LO TIENES».

Los cuatro pilares de la sabiduría
Esta iniciativa, según el máximo responsable de la firma, está apoyada en cuatro pilares empresariales. Uno: “Estar en Madrid, con los grandes proyectos de infraestructuras en marcha. Por la calidad de los clientes que hay en la zona centro era hora de que Cohidrex estuviera aquí. Ya tenemos entidad para darles servicio”. Dos, al hilo del anterior: “Como uno de los pilares de la empresa es los implementos para demolición, y los clientes potenciales están en Madrid: las grandes empresas de alquiler, las de demolición, las chatarreras, los concesionarios de maquinaria, etc., tenemos que traer el producto cerca del cliente y desde Cáceres era más complicado. Pero nunca vamos a renunciar a nuestros orígenes extremeños”.

El tercer pilar es la capacidad exportadora: “Había que solucionar el tema logístico a nivel de servicio. Desde Madrid, por la proximidad del aeropuerto, tenemos más cerca a los clientes de Europa y ganamos dos fechas en la distribución, con ahorros que redundan en ser más competitivos y abaratar costes. Hasta un 15% se encarecía el producto para el cliente, lo que en muchos casos nos dejaba fuera y no nos permitía ser competitivos. Ahora estamos viendo ahorros para los clientes de entre el 30-35% y hasta el 40% en algunos casos en el transporte. Si el producto gusta, el precio está bien y la imagen que transmitimos es buena, creo que vamos crecer mucho más en la parte de exportación y nuestra capacidad de crecimiento se va a revitalizar. Para la logística era fundamental estar en el Corredor del Henares”.

El cuarto pilar: “Con toda humildad, la casa tiene ya suficiente entidad para estar aquí y transmitir a sus clientes que somos una empresa nacional, segura, madura y fiable. Y que está en Madrid. El feedback que estamos recibiendo es fabuloso. Todo el mundo está expectante y estamos teniendo una acogida extraordinaria. Para mí es súper emocionante, a pesar de que, familiarmente, pasar de una ciudad pequeña y acogedora como Cáceres, donde teníamos nuestras raíces y nuestra vida, a estar en Madrid, está siendo un reto, especialmente duro para mi mujer, a la que agradezco públicamente su respaldo. Nos adaptaremos”.

SEGÚN DOMÍNGUEZ, LA FACTURACIÓN DE COHIDREX EN 2023 HA BAJADO UN 6% CON RESPECTO AL 2022, PERO LOS RESULTADOS HAN SIDO BASTANTE MEJORES, CRECIENDO UN 10%.

Orgullo y estrategia
En las palabras de Domínguez se desprendía que el desarrollo de su empresa tiene mucho que ver con el inconformismo, la autoexigencia, la humildad, la autoconfianza y, sobre todo, la labor bien hecha, además de la ilusión y el compromiso del equipo de profesionales que dirige, a los que dio las gracias porque sin ellos hubiera sido imposible llegar hasta aquí. “Les inoculé el entusiasmo y se han contagiado y están tan entusiasmados como yo desde el primer momento. Me siento muy orgulloso del proyecto y de mi gente, que me está acompañando con su empuje y su trabajo”, dijo.

Respecto a la logística de fabricación en China, se refirió a los problemas y retrasos de un mes en los pedidos que están teniendo como consecuencia de los bloqueos de las guerras, especialmente en Oriente Medio. Y señaló la ventaja de que los contenedores que vienen de Asia, ya sea de Corea, China o India, llegan antes a Madrid que a Cáceres. Un valor añadido a la logística de compras.

En cuanto a la facturación en 2023, Domínguez afirmó que ha bajado un 6% con respecto al 2022, pero los resultados han sido bastante mejores, creciendo un 10%. “Veníamos de los tres últimos años de crecimientos del 25%, 33% y 42%. Del año 19 al 22 habíamos casi doblado la facturación y en 2023 hemos bajado un poquito, un seis y pico por ciento, pero hemos obtenido mejores resultados. Los beneficios y el Ebitda han subido. Todo gracias a los ahorros logísticos”, dijo, especificando que en el 2021 y 2022 los costes de importación estaban disparatados: “En el año 18 y 19 estábamos pagando 1200 dólares por contenedor de puerto a puerto y hemos llegado a pagar hasta casi 10000 dólares”.

Alfonso Domínguez justificó esta medida: “Yo tenía muy claro que es preferible dejar de vender porque eres caro, a no poder vender porque no lo tienes. Es decir, si eres caro, a lo mejor no lo vendes, pero si no lo tienes, seguro que no lo vendes”. Nosotros apostamos en los años 21, 22 y 23 por seguir comprando y tener material a pesar de los altos costes, que tampoco hemos podido repercutir en el producto porque es imposible, el mercado no te lo permite. Pero por lo menos hemos podido dar servicio y los clientes lo han considerado y agradecido. Eso también ayuda a consolidarte”.

Afirmó el CEO de Cohidrex que “casi el 90% de las ventas de trenes de rodaje corresponde a la marca propia Trasteel Wear Parts, una marca global que abarca todas las líneas para ofrecer la máxima competitividad y rentabilidad en desgaste, rodaje e implementos.

Mejora constante en el servicio
Señaló, finalmente, que la puesta en marcha de esta nueva sede, en lo relativo a cuestiones burocráticas, “ha sido muy rápido en cuanto a las gestiones con el Ayuntamiento, todo han sido facilidades y ninguna traba”. Ante la presencia de los representantes de asociaciones, Javier Solís, de Unexma, Diego A. Hernández, de los empresarios cacereños, y Laly Escudero y Roberto Aldea, de Aedhe, Domínguez afirmó que “nos gusta ser activos con las asociaciones y las empresas y somos miembros de Unexpa, Amaexco, Anmopyc, Fenaex, etc.”. Los representantes gremiales se pusieron a su disposición y felicitaron al responsable de Cohidrex deseándole un feliz futuro cuajado de éxitos.

Decir también que la empresa extremeña lleva años cosechando numerosos y merecidos premios, que no hacen sino hablar de su extraordinaria labor en el sector y la impulsan aún más a seguir trabajando y esforzándose cada día para continuar en la senda fijada del crecimiento, en un momento, además, en el que se plantean serios desafíos para las empresas, como la sostenibilidad, la eficiencia de los recursos, la descarbonización, la tecnología o la digitalización – por no hablar de la Inteligencia Artificial–.

Cohidrex es hoy una marca reconocida y con una gran trayectoria tras muchos años de incesante esfuerzo y trabajo. Esto ya se dijo al principio de este texto, pero es que no hay mejor definición para una empresa tan ejemplar: es un referente de categoría en el sector de los repuestos de maquinaria para obras públicas, construcción y minería.