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Actualidad

15 Junio 2020

El sector reclama medidas urgentes

Explotación Áridos Anefa publica su informe anual 2019-2020.

El pasado 18 de junio, la asociación Anefa dio a conocer su informe anual sobre el sector de los áridos, elaborado a partir de datos de diferentes fuentes oficiales: Instituto Nacional de Estadística, Estadística Minera de España, ICEX España Exportación e Inversiones, y de estimaciones de la propia asociación y sus distintas demarcaciones geográficas (Afa Andalucía, Afapa, Afarcyl, Comc, Arival, Arigal y el Gremi d’Àrids de Catalunya). De sus conclusiones se desprende que una vez consolidados los datos estadísticos de consumo de áridos para 2019, el crecimiento ha sido finalmente similar al previsto, alcanzando el +6,6%, para un consumo total de áridos naturales para la construcción de 136,5 millones de toneladas, pero siempre partiendo desde valores todavía muy bajos y con gran variabilidad territorial. Desde el máximo previo a la crisis (2006), momento en el que la producción era de 486 millones de toneladas, el consumo de áridos para la construcción sigue en el –72% de lo registrado aquel año. El sector ha acusado el hecho de haber estado inmersos en una interminable sucesión de periodos pre-electorales, electorales y post-electorales que minó la actividad en la segunda mitad del ejercicio. El crecimiento registrado en 2019 sigue situando al consumo de áridos en España en los últimos lugares de Europa, muy alejado de los niveles de los países de nuestro entorno de la UE y más próximos al tercer mundo. Tras un inicio de ejercicio 2020 titubeante, a finales de mayo, por causa de la pandemia y de las diferentes limitaciones impuestas a las actividades, el sector todavía se encontraba padeciendo una caída de actividad de un –38,7% respecto a lo esperado. Preocupa la paralización de las tramitaciones de las Administraciones, que todavía no se ha subsanado adecuadamente y que está originando una importante caída de la cartera de pedidos. De no corregirse, esta situación tendrá efectos muy negativos en el tercer cuatrimestre del año. El sector urge a las Administraciones y a los partidos políticos a adoptar medidas y soluciones inmediatas para dinamizar la actividad económica de país, presentando 15 propuestas concretas.

Informe ÁridosEste informe de Anefa ha sido sometido a una revisión de la metodología de estimación que ha llevado a adaptar la serie histórica, modificándose los datos de los últimos años ligeramente al alza, respecto a informes anteriores. Así, el año 2019 se ha cerrado con un crecimiento del 6,6%, para un consumo total de áridos naturales para la construcción de 136,5 millones de toneladas. No obstante, se ha experimentado en el ejercicio una progresiva desaceleración respecto a las perspectivas iniciales, que se fue acentuando conforme se acercaba el fin del ejercicio.

Además, se mantienen variaciones territoriales importantes y dos comunidades autónomas experimentaron un leve decrecimiento. A esta cantidad hay que añadir 2,5 millones de toneladas de áridos reciclados y 1 millón de toneladas de áridos artificiales. El consumo total de áridos para la construcción alcanzó los 140 millones de toneladas (cuadro 1).

Es importante resaltar cómo la aplicación de los principios de la economía circular va avanzando de forma progresiva. Además, de los áridos reciclados y artificiales, ya citados, dentro de las cifras de áridos naturales, se contabilizan 4,9 millones de toneladas de áridos procedentes de otras industrias extractivas que los producen como subproductos de los procesos de extracción y tratamiento principales. Es decir, que sobre los 140 millones de toneladas de áridos para la construcción producidos en 2019, 6,8 millones de toneladas (4,8%) no proceden de explotaciones de áridos (cuadro 2).

EL SECTOR ESTIMA UNA CAÍDA DE ENTRE EL 20% Y EL 30% EN EL CONJUNTO DEL EJERCICIO, POR CAUSA DEL COVID-19.

Aunque el año fue algo más positivo de lo inicialmente esperado, se confirma el cambio de tendencia. No obstante, la industria se encuentra, todavía, muy lejos de los volúmenes de consumo aceptables y que son muy insuficientes para poder hablar de recuperación. Esta tendencia es muy similar a las registradas para los sectores afines. Desde el máximo previo a la crisis (2006), momento en el que la producción era de 486 millones de toneladas (Mt), el consumo de áridos para la construcción sigue en el –71,9% de lo registrado aquel año.

Distribución del consumo

Por otro lado, el crecimiento del consumo de áridos para la construcción, en 2019, muestra una evolución territorial positiva en la gran mayoría de comunidades autónomas, retrocediendo únicamente en el País Vasco (–0,9%) y Canarias (–0,8%). La Rioja (+1,4%), Baleares (+2%), Murcia (+3,0%) y Extremadura (+4,5%) son las comunidades autónomas con el crecimiento más débil (cuadro 3).

Por el contrario, Castilla-La Mancha (+17,4%) y Aragón (+14,3%) son las que han tenido un comportamiento más positivo en crecimiento porcentual, aunque las variaciones absolutas en volumen de consumo son todavía muy pequeñas.

Desde 2006, año del máximo histórico, el promedio global de variación del consumo es de –71,9% desde el valor máximo. Desde el punto más bajo de consumo de 2014, el incremento ha sido del 31,9%. Aplicando la media europea por habitante (5,7 toneladas/año), el país debería consumir, al menos, unos 265 millones de toneladas, cerca del doble del valor registrado en 2019 (cuadro 4).

Desde 2006, cuando el consumo de áridos por habitante en España era uno de los más importantes de Europa, con cerca de 12 toneladas/habitante/año (t/h/año), esta cifra ha sufrido una reducción considerable.

EL CONSUMO NACIONAL DE ÁRIDOS PARA LA CONSTRUCCIÓN CRECE UN 6,6% EN 2019, HASTA LOS 136,5 MILLONES DE TONELADAS, PERO CON UNA IMPORTANTE DESACELERACIÓN AL FINAL DEL AÑO.

Informe ÁridosA pesar del incremento de 2019, hasta las 2,9 t/h/año, sigue netamente por debajo de la media europea (5,7 t/h/año). Estos valores siguen siendo más propios de países subdesarrollados del tercer mundo que de una economía occidental integrada en la UE como la española. De los 39 países Europeos para los que la UEPG elabora estadísticas, España ocupa el puesto 38 (penúltimo), superando únicamente a la República de Macedonia del Norte.

Destacan, por lo negativo de los valores que presentan, Canarias (1,11 t/h/ año), la Comunidad de Madrid (1,51 t/h/año), Andalucía (2,48 t/h/año), y Baleares y Extremadura, ambas con 2,60 t/h/año. Ninguna supera le media europea.

Octavo lugar en Europa

Actualmente, España –que se encontraba en segunda posición en 2006– ocupa el octavo lugar de Europa en producción total de áridos, por detrás de Rusia, Alemania, Turquía, Francia, Polonia, Reino Unido e Italia.

Consumo de áridos por aplicaciones.

La distribución del consumo de áridos naturales para la construcción, en función de las aplicaciones, es la que se recoge en los cuadros 5, 6 y 7. Las canteras de áridos produjeron, asimismo, 44,7 millones de toneladas de áridos industriales con destino a la fabricación de aglomerantes, a la de productos cerámicos, a otros usos industriales, a la industria alimentaria y a la exportación. El 75,6% del consumo de los áridos industriales se destina a la fabricación de cementos y cales, que suman 33,8 millones de toneladas. Le siguen en importancia la exportación (1,9 Mt; 4,4%); la industria del vidrio (1,8 Mt; 4,1%), la industria química básica (1,8 Mt; 4,1%), la fabricación de productos cerámicos ((1,4 Mt; 3,1); la agricultura y jardinería (1,4 Mt; 3,1%); y la metalurgia básica (0,9 Mt; 2%). Por lo tanto, en 2019, se consumieron 181,2 millones de toneladas de áridos naturales para el conjunto de aplicaciones.

Informe Áridos

Origen de los áridos.

Contando los áridos reciclados y artificiales, se alcanzaron los 184,7 millones de toneladas de áridos totales. En cuanto yoritariamente de cantera (69,8%). El 25,7% procede de graveras, el 2,7% se origina como subproducto en otras explotaciones mineras, el 1,4% se produce en plantas de RCD y el 0,5% en plantas de fabricación de áridos artificiales.

Volumen de negocio.

Se estima en 605 millones de euros el volumen de negocio del sector de áridos para la construcción, excluido el transporte. El volumen de negocio de los áridos para otros usos industriales ascendió a 275 millones de euros. Por lo tanto, el volumen de negocio total alcanzó los 880 millones de euros.

A partir de los datos oficiales de la Estadística Minera de España, el valor medio nacional es de 4,50 euros/tonelada, con una caída del –7,4% respecto al periodo anterior. En el caso de las canteras, el valor asciende a 4,71 euros/tonelada, un 28% superior al de las graveras que es de 3,68 euros/tonelada.

Informe Áridos

Empleo.

El empleo directo asciende a 8349 trabajadores, a los que hay que sumar otros 14680 indirectos, para un total de 23029 trabajadores, según los datos de la Estadística Minera de España (2018) y otros propios. El incremento total de empleo se estima en un +4,3%. Además, hay unos 20000 trabajadores en empleos inducidos por el sector. Es decir que la industria de los áridos genera unos 43000 puestos de trabajo. Las comunidades autó nomas de Andalucía (16,5%), Galicia (14,9%), Cataluña (13,9%) y Castilla y León (9,9%) son las que generan más empleo. El peso del sector en cuanto a generación de empleo directo en la industria extractiva es muy elevado en Islas Canarias (95,2%), La Rioja (89,7%), y el País Vasco (87,5%). Por el contrario, los niveles más bajos se dan en Asturias (10,7%) y Galicia (23%). En conjunto, el sector de los áridos es el primer generador de empleo directo de la industria extractiva, con el 39,4% del total.

SIGUEN LOS VALORES DE CONSUMO DE -72% EN EL SECTOR, RESPECTO AL INICIO DE LA CRISIS DE 2006, POR LO QUE ESTE CRECIMIENTO ES MUY INSUFICIENTE.

Explotaciones.

Según los datos de la Estadística Minera de España (2018), el número de explotaciones de áridos activas (que reportan algún dato de actividad) asciende a 1757, cifra que supone el 65% del total de las explotaciones mineras del país, habiéndose incrementado la cifra en 3 explotaciones en el último ejercicio (+0,2%). Prácticamente se distribuyen al 50%, entre las 872 canteras (49,6%) y las 885 graveras (50,4%).

Según las informaciones disponibles, aproximadamente el 20% de estas (unas 350 explotaciones) tienen una actividad casi nula, por lo que la cifra más real es de 1400 explotaciones.

Cuatro comunidades autónomas, Andalucía (17,6%), Castilla y León (16,6%), Cataluña (15,8%) y Castilla–La Mancha (11,7%) destacan sobre el resto. En el País Vasco, Murcia, Baleares y Cantabria, el porcentaje de canteras es superior al 85%. Al contrario, en La Rioja, Castilla y León, Aragón y Castilla–La Mancha predominan las graveras, por encima del 70%.

El peso del sector de los áridos en cuanto a número de explotaciones es muy elevado dentro de la industria extractiva, con el 65% del total. Destacan Canarias (94,8%), Navarra (81,8%), La Rioja (78,3%) y el País Vasco (77,6%) por encima del 75%. Por el contrario, los niveles más bajos se dan en Galicia (36,3%) y la Región de Murcia (41,5%), que son las dos únicas comunidades autónomas por debajo del 50%.

De acuerdo con los datos del catastro minero obtenidos en junio de 2020, existen 7322 correspondientes a áridos, que son el 35,4% del total. De estos, 3386 están activos (el 46,2%) y 3094 (el 42,3%) en trámite de otorgamiento o autorización, mientras 842 están ya inactivos.

Ratios.

Partiendo de los datos oficiales de la Estadística Minera de España, se han calculado los siguientes ratios:

• Toneladas por explotación: 100340 toneladas/explotación/año.

• Toneladas por trabajador directo: 21116 toneladas/trabajador directo/año.

• Toneladas por trabajador total (directo más indirecto de extracción) 15085/trabajador total (directo más indirecto de extracción)/año.

• Euros por trabajador directo: 92066.

• Euros por trabajador total (directo más indirecto de extracción): 65770.

• Euros por explotación: 437484.

• Trabajadores directos por explotación: 4,8.

• Trabajadores totales (directo más indirecto de extracción) por explotación: 6,7.

El sector de los áridos en el contexto de la industria extractiva española.

Como resumen de los datos anteriores, contextualizados en los de la Estadística Minera de España, el subsector de los áridos representa, respecto al conjunto de la industria extractiva española:

• Primer subsector en empleo directo con el 39,4% del total.

• Primer subsector en número de explotaciones activas, el 64,1% del total.

• Primer subsector en volumen de producción con el 77,9% del total de las rocas y minerales extraídos.

• Tercer subsector en volumen de negocio con el 23,1% del total, tras la minería metálica y minerales industriales.

El sector de los áridos en Europa.

Por no hacer muy prolijo el informe, se incluye un cuadro resumen de datos (2018) procedentes de la UEPG (cuadro 8), donde se recogen los 39 países de los que la UEPG dispone de datos, los 27 de la UE más los de EFTA y los 27 de la UE. Estos datos se comparan con el dato de España de ese año y se estima la variación porcentual del dato español y su posición relativa entre los 39 países.

España es hoy el sexto país en número de explotaciones, el octavo en número de empresas, de trabajadores directos y de toneladas de áridos para la construcción.

Pero se observa perfectamente que hay un problema estructural, cuando se analizan los ratios más sencillos: España es el 19 país en ratio de explotaciones por empresa, el 23 en número de trabajadores directos por empresa, el 25 en número de trabajadores directos por explotación y el 33 en número de toneladas producidas por explotación. El tamaño de las explotaciones es excesivamente pequeño y se encuentra a la cola de los países de la UEPG. A todo esto hay que sumar como una de las causas de lo anterior, el que el consumo de áridos por habitante sea el penúltimo de Europa (38 de 39 países).

Por último, es interesante ver la evolución de la economía circular en la industria, pasando en 8 años del 8,6% del consumo al 12,8%. También se observa un retroceso constante de los áridos producidos en gravera, frente a los de cantera.

Previsiones para 2020

Las previsiones iniciales para 2020 apuntaban hacia una ralentización de la actividad respecto a 2019, pero con cierto crecimiento. Así, la previsión de una desaceleración económica general y la ausencia de una planificación a medio y largo plazo, habían llevado a todos los sectores de productos de construcción a revisar a la baja las cifras de 2019.

En circunstancias normales, se incluiría aquí un recopilatorio de indicadores adelantados. Sin embargo, la crisis sanitaria del Covid-19 ha devenido en una crisis económica de insospechadas dimensiones. Las diferentes encuestas realizadas para evaluar la situación del sector en las diferentes fases han mostrado una situación altamente preocupante. A continuación se muestra el resumen ejecutivo de la última encuesta de 26 de mayo:

—Salud: Reducción de la incidencia sanitaria del Covid-19, en el sector.

• La incidencia de la Covid-19 entre trabajadores se ha reducido, del 8,97% de empresas con algún trabajador infectado en la primera encuesta de hace más de un mes, al 0,98%. Y se ha pasado de 0,52% empresas con casos de contagio entre trabajadores en aquella encuesta, a 0% en el último cuestionario.

• También se observa un incremento de las empresas donde los trabajadores de riesgo (según el Ministerio de Sanidad) están pudiendo acudir al puesto de trabajo por decisiones del Servicio de Prevención, pasando del 36,8% de las empresas al 17,53% en la última encuesta. Se observa un cierto estancamiento.

—Caída de la actividad: Ligera mejoría pero con perspectivas negativas.

• La caída de actividad promedio declarada por las empresas es del -38,69% en las últimas semanas.

• Reducción de la actividad al 53% (1º periodo), 28,5% (2º periodo), pequeña recuperación al 45,1% (3º periodo), ligero incremento al 49,9% (4º periodo).

• En los últimos 21 días se ha recuperado ligeramente al 61,3%. Se produce una importante mejoría de +8,17% respecto al primer periodo.

• Se espera que la facturación se reduzca un –32,4% de promedio, con una ligera mejoría de 6,9 pp, respecto al periodo anterior.

• La caída de ventas para el año será del –34,6%. La perspectiva ha mejorado casi 7 pp.

• El nivel de nuevas ofertas es muy bajo (3,81/10), pero ha mejorado algo en el último periodo, estando en el –58% por debajo de lo normal, lo que sigo augurando un parón diferido de la actividad, si no se adoptan medidas dinamizadoras de la construcción.

• Además, de la previsible caída de las ventas, preocupa que los extremadamente dilatados plazos de pago de la construcción, en 116 días a finales de 2019 (147 días en la obra pública), según datos del Banco de España, crezcan abruptamente, cuando el plazo que establece la ley es de 60 días, comprometiendo la tesorería de las empresas y exponiéndolas injustamente a los impagos de sus clientes.

—Viabilidad de las empresas: la opinión es algo más optimista, aunque negativa.

• En promedio, las empresas consideran que sus problemas siguen disminuyendo en importancia, apuntando a una progresiva (pero lenta) normalización de la actividad. Destacan la incertidumbre, el desabastecimiento de Epis y la paralización de obras, como graves problemas.

• La estrategia comercial, los ratios de liquidez y tesorería, la gestión de personas, la comunicación y los impagados son las áreas más afectadas.

• Poco a poco, las perspectivas de las empresas, van mejorando, aunque siguen siendo muy negativas:

• En el 43,6% de los casos, las empresas creen que la plantilla disminuirá.

• En el 47,5% de los casos, las empresas no ve comprometida su viabilidad. El 9,9% sí y el 42,6% no lo sabe. La opinión es ligeramente más optimista.

• El 70,3% no considera que deba recurrir al concurso de acreedores, el 29,7% no lo sabe y el 0% considera que deberá hacerlo. Igualmente, la perspectiva es algo mejor.

Así que, ahora mismo, derivada de esta situación, existe una enorme incertidumbre sobre el comportamiento de la industria de los áridos en 2020, por los siguientes factores:

• Incertidumbre sobre la evolución de la pandemia a lo largo del ejercicio.

• Efectos del estado de alarma y de las correspondientes limitaciones impuestas sobre la actividad de la industria de los áridos y de la construcción.

• Evolución de sectores clientes y de la economía en general. Incidencia sobre el consumo interno.

• Evolución de las exportaciones.

• Afección a los precios de muchas materias primas.

• Caída del PIB. Actualmente el Banco de España prevé una horquilla de –9,0% a –15,1%, en función de la gravedad de los escenarios.

• Evolución del endeudamiento público.

• Crecimiento de la tasa de paro, que podría alcanzar el 24,7% en 2021.

• Comportamiento de los plazos de pago.

• Incidencia de los concursos de acreedores en cadena, por debilidad de las empresas cliente.

• Capacidad de las AAPP para corregir la parálisis de la contratación pública que podría desembocar en una grave paralización de la actividad en unos meses.

• Capacidades inversoras de las Administraciones para dinamizar la actividad económica. Decisiones de reparto de capacidades entre el gasto social y las inversiones productivas.

• Preparación de una cartera de proyectos y adopción de medidas de simplificación de trámites, para poder beneficiarse de los planes de estímulo de la UE.

• Apoyo de la Unión Europea al mantenimiento de la actividad económica.

• Requisitos de la Unión Europea a los Estados Miembro para el acceso a los fondos de ayuda.

• Disposición de los partidos políticos por alcanzar acuerdos en beneficio de los ciudadanos.

• Adopción de medidas eficaces para restablecer un clima de confianza para la inversión privada.

Con tan tremendas incertidumbres y una situación tan cambiante y dinámica, es imposible realizar una previsión consistente.

LAS EXPECTATIVAS APUNTAN A UNA CAÍDA DE ENTRE -20% Y -30%, A LA ESPERA DE MEDIDAS DE ESTÍMULO, PARA 2020 Y A UN ESCENARIO DE CRECIMIENTO EN 2021, PERO INFERIOR A LA CAÍDA DE ESTE EJERCICIO.

Propuestas del sector de los áridos

Entre las propuestas de medidas urgentes que reclama el sector y que se han trasladado a los partidos políticos, al Gobierno, a las Cortes y al Senado, a las comunidades autónomas, a europarlamentarios y que, asimismo, se han integrado en otras propuestas de las principales confederaciones del país, destacan:

Reactivación.

1. Inmediata reactivación de las obras públicas, sin recortes, y aprobación de un Plan Nacional de Construcción Verde (Green Construction), para compensar la caída del sector turístico durante 2020- 2021.

2. Aprobación de un Pacto Nacional por la Industria Sostenible 2030.

3. Apoyo, a través de CEOE, de un Pacto de Estado para la Reconstrucción Nacional.

4. Apoyo, a través de la CEOE y la UEPG, a que la Unión Europea desarrolle y mantenga un programa masivo de estímulo económico.

Liquidez.

5. Realización urgente de un Plan de pago a proveedores y de un RDl para el cumplimiento de la Ley 15/2010 de lucha contra la morosidad.

6. Aseguramiento del cobro de los suministros realizados.

7. Establecimiento de una moratoria urgente del pago de impuestos y cotizaciones sociales y reducción temporal de cargas impositivas.

8. Dotación de una cobertura crediticia en las operaciones comerciales.

9. Incremento de las líneas de avales del ICO y medidas para facilitar el acceso a los CNAEs de la Industria de materiales de construcción y de la industria extractiva.

Laboral.

10. Flexibilización de los Ertes y otras medidas de apoyo a los empleos.

Energía.

11. Adopción de medidas permanentes para la flexibilización de la contratación energética.

12. Ayudas para consumidores industriales de electricidad y gas natural y para la reducción de costes.

Industria extractiva.

13. Aprobación de una Estrategia Española de las Industrias de Materias Primas Minerales Sostenibles.

14. Acciones específicas de apoyo a las empresas de la industria extractiva.

Cambio climático y Pacto Verde.

15. Flexibilización y adaptación temporal de las estrategias y hojas de ruta sobre cambio climático, transición justa y Pacto Verde durante la crisis derivada del Covid-19.