En febrero de 2008, la prensa voló a Alicante para la presentación de nuevos productos de Volvo y la vuelta se hizo en el «Halcón Peregrino» de Iberia.

Viajar es fascinante, eso ya se sabe, aunque nos veamos obligados a ello por circunstancias laborales. Muchos han sido los viajes llevados a cabo por imperativo de la actualidad a lo largo de nuestra vida periodística, especialmente en este sector de la maquinaria de construcción, obras públicas y minería. Viajes por España y viajes por el mundo. Viajes cortos, de un día, y viajes largos, de una semana, a veces más si el destino estaba al otro lado del mapa. Incluso hemos rizado el rizo viajando al oriente lejano empleando tres días para emplear uno visitando una fábrica. Viajes gratos y viajes incómodos que por razones ajenas a nuestra voluntad se convirtieron en un infierno sin ventanas. Aunque, en general, de todos los viajes guardamos grato recuerdo. El que en esta ocasión rescatamos de nuestra hemeroteca particular es uno de ellos. Un viaje sencillo que giró la prensa a Alicante invitados sus representantes por Volmaquinaria, el distribuidor de la multinacional sueca Volvo, para asistir el lanzamiento europeo de productos de la marca, en febrero de 2008, justo antes de que se nos cayeran los palos del sombrajo de la crisis más brutal que hayan conocido los tiempos modernos. La peculiaridad del viaje es que coincidió con la celebración del 80º aniversario de Iberia y tuvimos la suerte de viajar en el «Halcón Peregrino», un flamante Airbus A319 que la compañía había elegido y pintado con la librea y los colores de las aeronaves de los años 40 y 50. El artículo lo titulamos: «Volvo se hace más fuerte». Esto ocurrió hace 16 años y por eso queremos resaltarlo ahora que comienza el ejercicio de 2024.

Durante el mes de febrero de 2008, Volmaquinaria de Construcción España organizó en la finca Torre de Rejas, cercana a San Juan y a la capital alicantina, una presentación multitudinaria para el lanzamiento europeo de las recientes novedades de Volvo CE, entre las que se incluía como primicia una nueva gama de equipos de compactación y extendido, producto de la adquisición en 2007 de la correspondiente división de carreteras de Ingersoll Rand con sus equipos de construcción de carreteras, que supuso una inversión de 1900 millones de dólares, cifra en la que se incluían las fábricas que IR poseía en Pennsylvania (EE.UU.) y Hamelin (Alemania), una inversión muy rentable que supuso aumentar la gama europea de 8 a 12 líneas de producto.

Esta división de IR estaba compuesta por 2000 personas y facturaba al año unos 1000 millones de dólares. Se unía a la larga lista de compras realizadas por el fabricante Volvo en los tres lustros anteriores: Zettelmeyer (1990), Åkerman (1991), Euclid- Hitachi (1992), Pel-Job (1996), Champion (1997), Samsung (1998), Skat Trak (2003) y la china Lingong, también en 2007.

Asistencia multitudinaria

A la presentación, que tuvo en exposición medio centenar de equipos Volvo, unos estáticos y otros en movimiento, asistieron distribuidores y clientes de todo el mundo, incluyendo un millar de personas de todas las organizaciones de distribución de Volvo. A los españoles, en número cercano a los 300, se les citó el día 15 de febrero para que pudieran conocer, además de los equipos, los nuevos métodos de trabajo, sistemas de supervisión a distancia, simuladores de producción, etc. Lo que demostraba el buen hacer de la multinacional sueca.

La prensa técnica, como es obvio, dimos fe de todo ello, asistidos por el equipo de entonces de Volmaquinaria, con su director comercial, Luis Puertas, a la cabeza, y con Alfredo Martínez, director de márketing; Mark Benfield, jefe de la división de carreteras; Miguel Valentín, director de desarrollo de ventas; y Araceli Gómez, responsable de publicidad y comunicación.

La interesante y completa exhibición de maquinaria Volvo, en esta especial jornada de lanzamiento europeo de productos, estuvo muy bien pergeñada por sus organizadores, que distribuyeron en pequeños grupos a los asistentes para hacer recorridos completos por cada línea de producto, con presentaciones previas y documentación abundante sobre la nueva y llamativa gama de carreteras, especialmente los compactadores de rodillos y “pata de cabra”, para tierras y asfalto, y las extendedoras de cadenas y de ruedas, además de las ya conocidas motoniveladoras del fabricante sueco. El acto culminó con un multitudinario y fraternal almuerzo donde todos lo pasamos fenomenal, amenizado por un brillante grupo musical y el sorteo de un viaje.

Por la tarde, emprendimos regreso a Madrid desde el aeropuerto de Alicante, donde tuvimos la fortuna los periodistas de abordar un Airbus A319 pintado con los colores que se usaron a mediados del siglo pasado en los aviones de la compañía Iberia. Los datos concretos del vuelo figuran en el recuadro adjunto.

P.F.