Los equipos de Wirtgen, que distribuye EMSA, participan en el dispositivo que está renovando el pavimento de 659 calles madrileñas.

Texto y fotos: P. Fajardo

La ocasión la pintan calva, como se suele decir. En Madrid, en plena pandemia, hemos pasado del silencio absoluto del desierto en que se convirtió la capital por mandato del estado de alarma, al bullicio callejero de la vida cotidiana tras levantar la autoridad el confinamiento de la población. Ese vacío de pálpito vital que se inició a mediados de marzo ha sido aprovechado por el Ayuntamiento para adelantar el plan estival de la «Operación Asfalto 2020» y poner en marcha a mediados de abril el dispositivo para reasfaltar las vías más deterioradas de la ciudad, que en esta edición redoblará sus esfuerzos para alcanzar 659 calles, con una inversión de 51 millones de euros. El plan, que durará hasta septiembre, permitirá mejorar 3,3 millones de metros cuadrados del pavimento, al tiempo que propicia la creación de 1600 puestos de trabajo, entre empleos directos e indirectos. Como parte de este ambicioso plan, los equipos del fabricante Wirtgen, distribuidos en España por la firma EMSA, están presentes en los tajos de la fisonomía urbana.

La “Operación Asfalto” de este año se ha adelantado en Madrid para aprovechar la ausencia de vida callejera, de tráfico y viandantes, durante los meses de abril y mayo a causa del forzoso encierro al que ha obligado a la población el estado de alarma originado por la pandemia del Covid-19. Ha debido ser espectacular asfaltar vías importantes de la capital, como el Paseo de la Castellana, frente al estadio Santiago Bernabéu, que también está en obras de remodelación, sin el follón que acompaña tradicionalmente a estas operaciones por los cortes de tráfico que ocasiona el trasiego de máquinas y operarios. Esta es la razón para que se haga todos los años en los tres meses de verano, cuando disminuye considerablemente el tránsito viario por las vacaciones de los madrileños. Esta vez se inició a mediados de abril y concluirá la campaña a finales de septiembre.

ENTRE LAS MÁQUINAS DE TODAS LAS MARCAS DE VARIADOS CONTRATISTAS Y DE TODOS LOS COLORES DESTACAN POR SU ABRUMADORA PRESENCIA LOS EQUIPOS DEL GRUPO ALEMÁN WIRTGEN.

Máquinas del grupo Wirtgen

En «OP MACHINERY» no hemos podido resistirnos a “echar un vistazo” a estos trabajos y nos hemos acercado, con la lista de las actuaciones previstas por el Ayuntamiento, a cotillear a los barrios de Chamartín y Tetuán, en distintos días de abril, mayo y junio, durante el confinamiento y en las distintas fases de la llamada “desescalada”, para recorrer sus calles, las grandes y las pequeñas, y comprobar la efectividad de los trabajos en la renovación de calzadas. Gracias al callejeo hemos podido contemplar el pálpito de esta importante labor profesional, sentir el aroma del alquitrán, la temperatura ardiente de la mezcla bituminosa recién esparcida y la belleza que cobra la estética urbana por el contraste entre la fisonomía clásica de sus edificios y el suelo ennegrecido por la emulsión asfáltica aún caliente. ¡Cómo cambia el aspecto de la ciudad cuando el pavimento que lo tapiza se nos muestra impoluto e incólume, dando esa sensación de primigenia pureza que tanto atractivo tiene para el viandante absorto en la contemplación de las formas, diseños y virtudes arquitectónicas!

En nuestro deambular perdido y sin rumbo por la cuadrícula de la urbe capitalina hemos divisado máquinas trabajando, muchas máquinas y equipos de todas las marcas, de todos los colores, para todas las funciones asfálticas y de variados contratistas. Entre ellas, debemos destacar por su abrumadora presencia en los tajos a los equipos del grupo alemán Wirtgen y sus marcas de referencia: las extendedoras Vögele, los compactadores Hamm y las fresadoras Wirtgen, maquinaria que distribuye en exclusiva en España la acreditada compañía madrileña Emsa, radicada en la población de Pinto.

UNA CAMPAÑA DE ASFALTADO URBANO DE SEIS MESES GENERA UN TOTAL DE 40 EMPLEOS, 16 DIRECTOS Y 24 INDIRECTOS, POR CADA MILLÓN DE EUROS INVERTIDO

Una operación ambiciosa

El Ayuntamiento de Madrid, como decimos, inició a mediados de abril este plan estival para remozar algunas calles importantes de la capital priorizando las calzadas a rehabilitar según el nivel de obsolescencia que soportan y la intensidad media de tráfico que alcanzan cada día. De los 21 distritos será Carabanchel, con 63 vías, el que más calles renueve entre primavera y el final del verano. Chamartín, con 49; Usera, con 48; y San Blas-Canillejas y Moncloa- Aravaca, con 41, son los siguientes barrios en el citado ránking.

La inversión prevista de 51 millones de euros permitirá mejorar 3,3 millones de metros cuadrados del pavimento y crear 1600 puestos de trabajo, directos e indirectos, durante la campaña. Esta cifra se desprende de las estimaciones realizadas por la Asociación Española de Fabricantes de Mezclas Asfálticas (Asefma) y, según estos cálculos, una campaña de asfaltado urbano de seis meses de duración, como es el caso este año, genera un total de 40 empleos por cada millón de euros invertido, 16 directos y 24 indirectos.

Durante los trabajos se utilizarán alrededor de 366000 toneladas de asfalto. En esta ocasión se ha planificado que, junto a las mezclas asfálticas en caliente tradicionales, se utilicen mezclas sostenibles y semicalientes, producidas con áridos de gran calidad respecto a las tradicionales, pero que se caracterizan porque su fabricación y puesta en obra se realiza a una temperatura inferior y presentan unas excelentes propiedades resistentes, un bajo nivel sonoro y una mayor durabiliutilizando de forma preferente en las calles de mayor intensidad de tráfico, lo que supondrá alrededor de 78600 toneladas sobre una superficie de 946000 m², es decir, que se aplicará sobre un 29% de las calles que se están renovando en la urbe capitalina.

Gracias a ello se reducirán las emisiones de gases contaminantes, como el CO2 y el SO2. Además, la disminución de la temperatura reduce también el consumo energético entre un 11% y un 35% y permite trabajar a temperaturas ambientales más bajas. Durante la operación asfalto se utilizarán unas 43000 toneladas de este tipo de mezcla, que se extenderá sobre una superficie de 350000 m², lo que implica un 11% del total de los viales.

SE UTILIZARÁN 366000 TONELADAS DE ASFALTO Y SE HA PLANIFICADO QUE, JUNTO A LAS MEZCLAS ASFÁLTICAS EN CALIENTE TRADICIONALES, SE UTILICEN MEZCLAS SOSTENIBLES Y SEMICALIENTES

Ejecución sin precedentes

Según subrayó la delegada de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid, Paloma García Romero, durante esta campaña se rehabilitarán más calles que la suma de las asfaltadas en los últimos tres años, que ascendió a 616: 129 en 2017, 139 en 2018 y 348 en 2019. De hecho, la que fue anunciada como “la mayor operación asfalto de la historia” de la ciudad, en 2018, ni siquiera llegó a consumarse en tiempo ni en cantidad. La superficie de pavimento realmente renovada en aquel año, todavía bajo el mandato de la anterior alcaldesa, fue de aproximadamente la mitad de la anunciada, ya que se renovó un 51,2% de la superficie de pavimentos anunciada. Y el número de calles ejecutadas fue únicamente del 43%: 139 frente a 320 anunciados, según los datos de ejecución real. Han tenido que transcurrir más de dos años y llegar una pandemia para conseguir su ejecución completa.