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Actualidad

01 Enero 2022

La playa de Peñíscola (y 3)

José María Pozas

El técnico añade: “No estoy seguro si el proyecto era del Plan Feder pero tengo la cuasi certeza de que si lo era nunca se hubiera propuesto arena caliza para una playa tapada con arena natural de la propia bahía. Tenemos otros muchos ejemplos de playas regeneradas realizadas con arenas silíceas o arenas naturales traídas en barco desde Marruecos, como la Playa de Poniente en Benidorm, de unos 3 km de largo que está a nivel de carretera y que no se ve afectada por temporales que saquen la arena de la playa”. Y concluye: “Claro que el costo es muy diferente; y la pregunta siguiente ha de ser: ¿Por qué se cambió de arena? La cual nos lleva a ¿quién o quienes se beneficiaron de ese cambio?”.

Recuerden, queridos lectores, que el precio en aquellos días de la arena silícea era cuatro veces mayor que el de la arena calcárea, finalmente utilizada. Recuerden también que el previsto material a utilizar según el proyecto inicial era de 2000000 de m3, y en el resumen final se habla solo de 1200000 m3, quedando siempre los 300000 m3 a extraer de la playa sur de Peñíscola, tanto en el proyecto como en el resumen final. Así que se utilizaron 800000 m³ menos y los 1200000 m³ utilizados costaron una cuarta parte de lo presupuestado. Increíble, ¿verdad? Haría falta conocer al detalle el presupuesto para calcular el importe cobrado y no gastado; tampoco podemos señalar a ninguna empresa en concreto. Lo único que se conoce es que la arena calcárea utilizada provino de una cantera cercana –no sé si se creó ad hoc o ya existía– sita al otro lado de la autopista en el término municipal de Santa Magdalena de Pulpis, según creo. Cualquier persona en Peñíscola la conoce. Y tampoco se sabe si estaba en el ajo o no, y no sospecho que lo estuviera pues lo normal es encontrarse con personas y negocios decentes, en tanto los que se quedan con el premio mayor juegan en otra categoría y tienen otros vínculos.

De modo que ya tenemos claro porqué tenemos la playa que tenemos y también porqué tenemos en Europa la fama que tenemos.

Lo último que estamos conociendo estos días es que Europa pretende que las ayudas del fondo europeo para la Reconstrucción que se negocian ahora se concedan para proyectos que cada país ha de presentar y el Fondo aceptar. ¿Por qué? Muy sencillo, porque temen que recibamos el dinero y lo empleemos en otros menesteres distintos, en proyectos que no se realizan tal como venían redactados, y otros artilugios fiscales en los que una parte importante de nuestro tejido empresarial es especialista. Es decir, que sabiendo lo que necesitamos y la justicia de esa necesidad, lo que quieren es estar seguros del destino de las transferencias, en parte a fondo perdido.

 TEMEN QUE RECIBAMOS EL DINERO Y LO EMPLEEMOS EN OTROS MENESTERES DISTINTOS, EN PROYECTOS QUE NO SE REALIZAN TAL COMO VENÍAN REDACTADOS, Y OTROS ARTILUGIOS FISCALES EN LOS QUE UNA PARTE IMPORTANTE DE NUESTRO TEJIDO EMPRESARIAL ES ESPECIALISTA.

Esta frase era el cierre de una entrada en este blog, titulada Nos tienen envidia, del 15 de julio de 2020 (Pueden verla clicando aquí: https://literharturas.blogspot.com/2020/07/nos-tienenenvidia_15.html), en la que tratábamos de explicar la razón de que los fondos europeos para la Reconstrucción –los que pretenden impulsar esa recuperación económica tan necesaria– sean objeto de un escrutinio minucioso por parte de los funcionarios europeos.

Todos sabemos que los dos partidos que se han alternado en el gobierno han tenido notorios casos de corrupción, especialmente el que hace de la virtud bandera, que ha visitado más los tribunales de justicia que todos los demás juntos, y que tiene a la cúpula judicial a su servicio.

Al margen de todo esto, se lleva a cabo constantemente la regeneración dunar de distintos puntos en la playa, por la necesidad de encontrar soluciones a la problemática que generan los temporales inundando el paseo marítimo.

Por su parte, las operaciones de mantenimiento, acarreando arena de la playa Sur, como la que se ha hecho este invierno, más los constantes trabajos nocturnos con maquinaria especial cuyo objetivo parece ser apelmazar la arena para que el mar no se la lleve, han de representar un esfuerzo económico sin fin. En resumen: se ha gastado todo el presupuesto, se ha perjudicado la playa, se elevan los costes de mantenimiento, y los temporales campan por sus respetos.

Hagan memoria y traten de recordar qué empresa fue la adjudicataria de la famosa regeneración playera; yo no lo consigo, solo puedo recordar que no era una de las clásicas y conocidas, sino una empresa valenciana. Esta empresa es la que nos podría explicar este mejunje que yo no he podido esclarecer, y si me he equivocado, hacerme retractar del todo.

José María Pozas | Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.


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